Preparación:
El bacalao se pone en remojo el día anterior, cambiándole el agua varias veces. Ya desalado se pone en un cuenco con el zumo de limón. En otro cuenco se pone la harina y en su centro abrimos un agujero para echar la sal, la levadura, el aceite y el agua. Lo revolvemos y lo dejamos reposar un rato tapado. Se cogen las tiritas de bacalao y se sumergen en esta mezcla. Se fríen en aceite muy caliente y se sirven inmediatamente.
1 comentario:
La semana que viene, cae
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